Crítica II a la educación
La primera critica hablaba de la incapacidad que tiene la educación de prepararnos para lo incierto, de cómo nos tranquiliza y nos dice que todo lo podemos entender porque somos seres racionales; esta segunda crítica se enfoca en la visión que actualmente tienen los centros educativos, es decir, su principal ambición. Cada colegio y universidad en la ciudad está comprometido asiduamente en convertirse en la mejor fábrica de gente productiva; cada uno se esmera en construir el mejor discurso de porque esa institución en particular y no las otras, le entregaran a sus hijos o a usted, las herramientas necesarias para tener éxito en este mundo agitado y competitivo.
Se convierte en un reto absurdo, intentar realizar un pronóstico de humanidad, basándonos en el desempeño y las notas de un estudiante en particular; básicamente, porque a las instituciones se les olvido que son centros de construcción humana; motivan a sus estudiantes a mejorar las habilidades analíticas y comunicativas, asumiendo que la tarea de aprender a manejar sus emociones esta implícitamente designada a cada uno de ellos, de hecho, mientras mejor encubiertas, mejor entrenados para para la vida.
Con el deseo fundado de mostrarle al mundo esa esencia limitada y adulterada; pasamos de una época a otra, en este viaje de evolución de raza, como tratando de llegar a alguna parte, aun cuando pudimos haber llegado ya, aun cuando podemos estar alejándonos cada vez mas de nuestra misión humana.